100 años

Saludos camaradas, para la gran mayoría de la gente , el día de hoy que ya se está terminando por cierto, 14 de Febrero, es el día en el que demuestran con más afán el amor que sienten por su pareja. Yo tengo ya un buen tiempo sin pareja a mi lado, alrededor de dos años, y aunque he aprendido cosas gratas de la vida en todo este tiempo de "soltero", no pienso pasar el resto de mi vida sólo, ya que el amor es algo indispensable a nuestras vidas, muchas veces por conveniencia, otras por compañía, otras por atracción, otras por "química", pero siempre requerimos tener a una mujer a nuestro lado.
Aún recuerdo mis años de adolescencia (15-21), cuando sufrí grandes traumas por parte de las mujeres, desde mujeres traicioneras hasta mujeres nobles a las que yo ofendí por pendejo, y de todos los recuerdos que me quedan, los que más me pesan son aquellos en los que yo tuve la culpa de que se diera una ruptura en alguna relación.
Mi etapa de adulto (22-a la fecha) la he vivido más centrado, más racional, de hecho ya no me apasiono con la misma intensidad con las mujeres que he tenido a mi lado, ya que recuerdo que en la adolescencia incluso me hallaba en condiciones de cometer locuras por un amor.
Por lo anterior, creo que la etapa más arrebatada para vivir una relación es la adolescencia, ya que nuestra parte "emo" está más a flor de piel, y en cualquier vaso de agua sentimos que nos ahogamos.
Esta canción del inmortal Pedro Infante: "Cien años", me trae muy buenos recuerdos de mi pasado, ya que cada vez que una mujer me traicionaba, el ponerla en mi Walkman me hacía elevar mis sentimientos a niveles insospechados.


Pedro Infante - Cien años
http://www.youtube.com/watch?v=KK2pPBJZrrY

Cien años (letra)
Pasastes a mi lado - con gran indiferencia - tus ojos ni siquiera - voltearon hacia mi - te vi sin que me vieras - te hablé sin que me oyeras - y toda mi amargura se ahogó dentro de mi - Me duele, hasta la vida - saber, que me olvidaste - pensar, que ni desprecios - merezca yo de ti - y sin embargo sigues - unida a mi existencia - y si vivo cien años - cien años pienso en ti

Hoy en día incluso me parece extraña mi forma de actuar de aquel tiempo, más no puedo dar consejos a los adolescentes en ese aspecto, porque hay que vivir estas emociones en carne propia y madurar a través de ellas para saber que el día no se acaba cuando se da la doceava campanada de medianoche.

¡Pasen buenos días!